“El Sitp está en una profunda crisis económica y naturalmente eso que se traduce en una profunda crisis de servicio. Si esto no se resuelve, es posible que al final de este año o a mediados del entrante la ciudad se quede sin servicio”, expresó ante los medios de comunicación Víctor Raúl Martínez Palacio, vocero operadores del Sitp (Consorcio Express, Gmovil, Tranzit, Masivo Capital, Etib, Suma y Este es mi bus).
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Estas declaraciones las realizaron los concesionarios en conjunto, asegurando que el sistema está atravesando por una profunda crisis.
A su vez, las empresas concesionarias del Sitp denunciaron que actualmente tienen acumuladas pérdidas cuantiosas superiores 8 billones de pesos, por lo que de los 7 mil buses vinculados al Sitp tienen más de 800 buses varados en los patios por falta de mantenimiento.
Estas declaraciones son una tragedia anunciada, en las que los primeros afectados son los ciudadanos de a pie, que todos los días deben tomar el transporte público para cumplir con sus obligaciones.
Con la decisión de TransMilenio, de suspender la operación del concesionario Suma del Sitp, afectando las rutas que salen de Ciudad Bolívar, la crisis se sigue agudizando.
El panorama no es alentador
De acuerdo con el Representante a la Cámara por Bogotá, Carlos Eduardo Guevara del Partido Político MIRA, se podría decir que el hecho de que las aseguradoras no le otorgaran la póliza de cumplimiento a la empresa operadora del transporte público en Ciudad Bolívar, equivale a decir que le acaban de entregar su acta de defunción, afectando a más de 700 mil habitantes de Ciudad Bolívar que amanecieron el miércoles sin transporte público, afectando su bolsillo y exponiendo sus vidas en rutas piratas. Esta situación es sólo el abrebocas de la situación que se puede replicar en toda la ciudad y que puede dejar sin transporte público a más de dos millones de habitantes.
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“Esperamos que esta no sea una jugada del Distrito para generar pánico en el mercado y declarar una emergencia social en movilidad que le permita tener carta abierta del sistema, que sería muy nocivo para los usuarios del servicio, pues no vemos acciones del Distrito en pro de solucionar la crisis financiera del transporte público de la ciudad. Es paradójico que el transporte público colectivo que fue tan criticado, hoy siga vivo y sea la mejor opción de los bogotanos, echando en saco roto los más de 4 billones de pesos que se invirtieron es estudios, diseños e implementación del sistema”, argumentó Guevara.
Por otra parte, Fernando Rojas, experto en Movilidad expresó en diálogo con PUBLIMETRO que “lo que está pasando en Ciudad Bolívar es una muestra del grave riesgo que corre Bogotá si la Alcaldía y los operadores del Sitp no renegocian los contratos, para corregir todos los problemas que tiene el sistema y que hoy tienen en jaque financiero a los operadores, se puede poner en riesgo las finanzas de Bogotá”.
La tesis de Rojas, en cuanto a la posible solución a las crisis, es similar a la de Fernando Rey, profesor de la facultad de ingeniería Civil de la Universidad Santo Tomás y experto en movilidad, quien en comunicación con este medio indicó que el mejor escenario ante la situación del Sitp está en el diálogo: “Se necesita que las dos partes (Alcaldía- Operadores) se sienten a revisar el tema y encontrar soluciones. El tema viene desde la administración de Samuel Moreno, por eso el sistema debe estarse revisando permanentemente para darle los ajustes que se requieran; a mi juicio no hay otra forma que sentarse a revisar los contratos”.
