Bogotá

Una apuesta por el medio ambiente en la Sabana

¿Qué aire respiramos?, pocas personas se hacen esa pregunta que tiene mucha relevancia en nuestra vida. Pocos saben cuál es la calidad del aire que respiran y el tema pasa sin pena y sin gloria. En las últimas dos décadas las emisiones de CO2 han ido en aumento. Para finales de 2016, un informe presentado por el Ideam, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Inventario Nacional de Emisiones de Gases Efecto Invernadero, señaló que en Colombia crecieron estas emisiones en 15% durante los últimos 20 años. En 1990 el cálculo era de 245 millones de toneladas (Mton) de CO2 y para el 2010 fue de 281 Mton, es decir 36 Mton más.

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Sin embargo, y gracias a un convenio entre la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) y la Corporación Ambiental Empresarial (CAEM), adscrita a la Cámara de Comercio de Bogotá, más de 400 empresas en más de 26 municipios de jurisdicción de la CAR, le han apostado a mejorar su gestión ambiental, específicamente en el tema de la huella de carbono. Como resultado, en la actualidad se logró la reducción de 19.600 toneladas de CO2.

Por supuesto, esta mejora no solo se le ve reflejada al medio ambiente sino a la economía de la empresa. Eso sí, tuvieron que hacer grandes cambios para que los resultados se empezaran a evidenciar. Tanto así, la CAEM identificó que las calderas, los hornos y las plantas eléctricas son los principales generadores de gases de efecto invernadero. Entre los municipios se destacan Tenjo, Ubaté, Sopó, Tocancipá, Madrid y Mosquera.

 

 

 

 

 

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