Maicol Acosta, un estilista de Bogotá, murió como una víctima más de los malos procedimientos estéticos. El joven se dejó inyectar aceite de silicón de su jefe con el fin de mejorar su apariencia física.
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Sin embargo, con el paso de los días empezó a enfermar y sufría de fiebre de 39 grados, además de salpullido en todo el cuerpo y dolor corporal como informó Caracol Radio en este nota.
Acosta, según sus familiares, estuvo internado en el hospital Simón Bolívar por más de dos meses debido a la infección que se generó en su cuerpo por la sustancia. Sin embargo, esta semana falleció y al parecer la persona que le aplicó el silicón está prófugo ya que encontraron su local cerrado y no hay rastro de él.
Las investigaciones continúan.