Varias voces de concejales de Bogotá se han levantado en contra del Plan de Desarrollo propuesto por Enrique Peñalosa, incluso desde su propia coalición.
Por ejemplo, el presidente de la Comisión de Hacienda del Concejo, Henry Torrado, le pidió al alcalde retirar los artículos en los que la financiación del proyecto depende de propuestas no aprobadas como la venta de ETB, la instalación de peajes urbanos o la adopción de vigencias futuras.
Por su parte, la concejal de MIRA Gloria Stella Díaz rechazó que solo se dedique el 0,16% del presupuesto del Plan para la atención de temas relacionados a la mujer, en especial cunado el propio proyecto destaca como uno de sus objetivos una mayor igualdad entre géneros.
Adicionalmente, el concejal del Polo Manuel Sarmiento consideró «tramposa» la forma en la que la Alcaldía busca financiar el Plan con participaciones de empresas como Acueducto o TransMilenio que, según el cabildante, solo podrían ser cubiertas subiendo las tarifas de agua y de pasajes de SITP, respectivamente.
El Plan de Desarrollo que el alcalde Enrique Peñalosa propuso al Concejo de Bogotá ha desatado muchas polémicas, debido a la gran cantidad de críticas que distintos grupos le han planteado a la carta de navegación del gobierno bogotano en los próximos cuatro años.
PUBLICIDAD
Pero el Plan de Desarrollo va mucho más allá de un mecanismo para imponer peajes urbanos o autorizar la construcción en la Reserva Thomas van der Hammen. En el anteproyecto presentado al Concejo, y al que tuvo acceso PUBLIMETRO, se encuentran cambios profundos en varios temas críticos de Bogotá.
La primera de estas situaciones es la expansión y densificación del área urbana del Distrito Capital, la cual se busca que se desarrolle en tres ejes: uno ubicado en la ronda del río Bogotá, otro en Bosa y el tercero en el área de la Reserva Van der Hammen. Estas áreas buscan duplicar el número de hogares residentes en Bogotá, pasando a una población aproximada de 15 millones de personas para el 2050.
Estas zonas tendrían acceso al resto de la ciudad mediante «autopistas de bicicletas», acceso a sistemas de transporte masivo (no especifica cuáles), malecones y conexión al anillo ambiental que propone la Alcaldía.
Este anillo formaría parques lineales a lo largo de los ríos Bogotá, Tunjuelo, Fucha, San Cristóbal y Salitre, conectándolos con los cerros orientales, los humedales Córdoba, La Vaca, Jaboque y Juan Amarillo, dos nuevos parques en los cerros de Torca y de La Conejera, y con un «corredor verde» que proteja las zonas más críticas de la Reserva Van der Hammen.
En cuestión de medio ambiente, el Plan de Desarrollo llama a medidas concretas como reducir en un 10% concentraciones de PM10, PM2.5, disminuir la emisión promedio de ruido a un nivel aceptable, ampliar el número de kilómetros de ríos urbanos descontaminados en un 50% y mejorar en un 30% la cobertura vegetal en el espacio público.
El proyecto también busca sacar vehículos de las vías pasando a sus conductores al transporte masivo, en lo que entrarían las polémicas decisiones de aumentar los costos de parqueaderos y cobrar por la posibilidad de circular en el período de pico y placa.
PUBLICIDAD
Se propone financiar la construcción de las grandes obras como la primera línea de Metro, la Avenida Longitudinal de Occidente, la Calle 63 hasta Funza, la continuación de la Carrera 10 hacia el sur mediante un túnel hasta Molinos y la reubicación de Corabastos y las cárceles Modelo y Buen Pastor mediante alianzas público privadas.
Así mismo, intentará consolidar a Bogotá como un hub turístico y de negocios de la región, así como maximizar el uso y apropiación de TIC entre sus habitantes, disminuir la brecha salarial entre géneros en la ciudad, e incrementar de 23 a 30 billones de pesos anuales el recaudo de impuestos distritales.
A pesar de esto, ya se han registrado críticas intensas a grandes partes del Plan de Desarrollo, que dificultarán su tránsito en el Concejo (ver recuadro). Los más de 90 billones de pesos que podrá costar este plan le cambiarían la cara a Bogotá, pero queda pendiente qué partes aprueba el cabildo y cómo deberá ajustarse Peñalosa, sobre todo si se cierran posibilidades como la venta de Capital Salud o ETB.