Twitter, Gustavo Petro y una ambulancia

Escuhe la voz de la madre y la historia en audio

Kevin, de 10 años de edad, sufre insuficiencia renal crónica. El infante actualmente se encuentra en el Hospital Santa Clara de Bogotá y necesita una gammagrafía ósea y una resonancia nuclear que identificarán si sus huesos tienen algún tipo de infección.

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Luego de pelear durante varios días con Caprecom para que autorizaran los exámenes finalmente su madre lo logró. Les asignaron la cita para ayer en horas de la mañana pero por el desorden de la prestadora de salud no se concretó la ambulancia.  

A las ocho de la mañana no se sabía si llegaría un vehículo para llevar al niño lo que ocasionó angustia en la familia. Si no se resolvía perdería la cita.

Como en Caprecom no respondieron la usuaria @lore_gonzalez empezó a publicar la necesidad de Kevin en Twitter y le envió una petición al alcalde . El primer mandatario le pidió el nombre y la razón de la urgencia. La usuaria le explicó y una vez se aclaró todo Petro le pidió un número telefónico.

La usuaria celebró porque con la intervención del primer mandatario de la ciudad Kevin tenía asegurado su traslado.

La ambulancia no llegó

A las 10:00 de la mañana Publimetro.CO se comunicó con la madre para confirmar la llegada del vehículo.   “Me llamó un funcionario de la Secretaria de Salud para preguntarme qué pasaba. Una vez me hizo las preguntas me dijo que volvería a llamar pero no lo hizo”, afirmó su madre Liliana Gonzalez.

Publimetro.Co se comunicó con la oficina de prensa de la Secretaría de Salud donde un funcionario afirmó que no tenía idea del tema.   Pidió que llamáramos a Alexander Paz,   del Centro Regulador de Urgencias, quien podría saber qué había pasado.

A las 11:00 de la mañana Liliana confirmó que no había llegado el vehículo y se había perdido la cita médica.

El funcionario del Centro Regulador afirmó que legalmente no tenían la obligación de prestar ayuda ya que Caprecom era la entidad que se había comprometido a coordinar la ambulancia y no lo hizo. Aunque la intervención del distrito corresponde a una actividad humanitaria la conclusión del tema es que no se logró el traslado del niño a pesar de la respuesta tuitera del alcalde.

 El caso de Kevin pone sobre el tapete los pros y contras del gobierno 2.0. Si bien es cierto que Gustavo Petro no le puede, ni debe, responder   a todas las necesidades de los bogotanos a través de su red social ¿qué pasará cuando en casos como el de Kevin no se logra obtener una respuesta al ciudadano?. ¿Cuál es la ordenación jurídica y administrativa que implica el gobierno por Twitter?.   Dos preguntas que quedan en el tintero y que la ciudad deberá empezar a resolver así sea para casos humanitarios o donde esté obligado el funcionario público a responder por Ley.