El equipo del astrofísico Jordi Cepa logró hacer visible lo invisible.
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El científico español es el investigador principal de un nuevo censo de galaxias que incluye las que él mismo denomina "fantasmas".
Los censos más conocidos de galaxias se basan en la luz proveniente de las estrellas, ¿pero qué sucede cuando las estrellas emiten tan poca luz que no pueden verse con la gran mayoría de los telescopios actuales?
El nuevo censo, denominado OTELO, fue elaborado gracias a un instrumento pionero del Gran Telescopio Canarias o GTC, el mayor telescopio óptico e infrarrojo completamente orientable del mundo, debido a la capacidad colectora de luz de su espejo primario de 10,4 metros de diámetro.
Fue ese instrumento, denominado OSIRIS, cuya fabricación había sido propuesta años atrás por el mismo Cepa en colaboración con el investigador Jesús González, de la UNAM, el que permitió al investigador elaborar el censo de galaxias más profundo hasta la fecha, que incluye más de 11.000 galaxias que no aparecían en censos anteriores.
¿Cómo logró el equipo de investigadores identificar esas galaxias fantasma?
Igual que en las lámparas de bajo consumo
"Hay que partir de la base de que las galaxias se componen de estrellas y de gas", señaló Cepa a BBC Mundo.