La pacífica vida de la profesora Iveth Salas y el fotógrafo Ismael Morales se partieron en dos tras la filtración de un primer grupo de imágenes de la maestra desnuda en diversos sitios públicos del municipio.
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Sin embargo, tras el escándalo han aparecido en redes sociales nuevas fotos de jóvenes cereteanas ligeras de ropa cuyas imágenes fueron captadas en el interior del Centro Cultural Raúl Gómez Jattin.
El primer sospechoso de captar estas imágenes es el gestor cultural y exempleado de esta casa de cultura en Cereté Ismael Morales Padrón.
Padrón es un recocido miembro del sector cultural del municipio dedicado a la fotografía artística como figura en sus cuentas de Facebook y Flickr. El hombre antes del hecho era el encargado de organizar las veladas culturales de esta población costeña.
Según El Meridiano de Córdoba, Morales es hijo único y vive en el barrio Santa Clara del municipio. Actualmente quedó desempleado, pues a raíz de este inconveniente presentó su renuncia como Coordinador de Procesos en el centro Cultural Raúl Gómez Jattin para atender el proceso.
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Sin embargo, en diálogo con la W Radio Iveth Salas aseguró que nunca tuvo una relación amorosa con Morales y denunció que había sido intimidada por el fotógrafo al momento de realizar las fotos. “Estaba bajo la presión psicológica de él, porque tenía un cuerpo bonito y esa fue la debilidad que tuve al momento de acceder a tomarme las fotos”.
Ismael Morales negó las intimidaciones a la maestra argumentando que “yo tendría que tener algún poder psíquico para hacer sucumbir el intelecto de una persona y obligarla a que se tome unas fotos completamente desnuda”.
También subrayó que “hicimos las fotos, que son bastante claras y ella no está bajo el influjo de ninguna sustancia psicoactiva ni obligada y allí está claro”.
El fotógrafo explicó también por qué, según él, la docente cereteana tenía en su poder un computador del Centro Cultural Raúl Gómez y comentó que: «En el mes de mayo, ella me contacta, me dice que es docente que está pasando notas y me preguntó si podía facilitarle un computador. No vi nada malo. Nunca manejé ese computador. A los pocos días le pedí el equipo pero ella manifestó que le diera unos días más, eso quedó ahí. Hace unos 20 días ella me llamó y me dice que había visto en el celular de un amigo/a unas fotos de ella y me acusa directamente de que soy la persona responsable de la divulgación de las fotografías».
Sobre las otras fotos que han aparecido
A cerca de las demás imágenes que han surgido en redes de mujeres desnudas tomadas al interior del Centro Cultural de Cereté, el fotógrafo aseguró que él no las tomó, y que esas imágenes hacen parte de otra investigación, que está en curso en la Fiscalía. “Cómo ha sido boom mediático ahora aparecen fotos por doquier”, resaltó.
El fotógrafo pidió a las autoridades hacer un rastreo a las nuevas fotografías para que se dé a conocer de dónde están saliendo porque él niega ser su autor.
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PUB/L.R.