Dilan Camilo Erazo Yela, un niño de 10 años, fue asesinado mientras jugaba fútbol con sus amigos en una cancha sintética de Argelia, Cauca. El menor participaba en una semana cultural y recreativa cuando un tatuco, lanzado desde un dron, cayó sobre el escenario deportivo.
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El trágico incidente ocurrió alrededor de las 9:20 p.m. del martes 23 de julio en el corregimiento de El Plateado. Según información del Ejército, los responsables del atentado son miembros de la estructura Carlos Patiño, parte de las disidencias del Estado Mayor Central de las FARC.
La explosión dejó al menos diez heridos, siendo Dilan Camilo el más afectado. Videos grabados por la comunidad mostraron el momento en que el personal médico intentaba reanimar al menor, pero sus esfuerzos fueron en vano. El niño sufrió una hemorragia interna y no sobrevivió. El helicóptero de la FFPP no pudo aterrizar para trasladarlo a un hospital de nivel.
Así era Dilan Camilo Erazo, el niño que murió en medio de ataques con explosivos de las disidencias en Cauca
Consternada por el ataque, la comunidad de El Plateado marchó el miércoles con banderas y globos blancos para expresar su rechazo. “Queremos que la región del Micay recobre la esperanza y que podamos en algún momento vivir en paz. Hay que decirle a todos los actores armados que dejen a la población civil por fuera del conflicto armado”, manifestó el alcalde de Argelia, Osmán Duan Guaca Acosta.
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Las Fuerzas Militares han iniciado una ofensiva para capturar a los cabecillas de las disidencias en el Cauca. El objetivo es localizar a alias Andrés Patiño, alias Zamora, alias Giovanni y alias Kevin, cabecillas responsables del ataque en El Plateado.
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El asesinato de Dilan Camilo ha conmocionado a la comunidad y ha puesto de relieve la necesidad urgente de paz y seguridad en la región. Las autoridades locales y nacionales están bajo presión para tomar medidas efectivas que protejan a la población civil y prevengan futuros actos de violencia.
