Los viernes, por ejemplo, es el día en el que aprovechan para ingresar a las zonas aledañas y consumen licor y sustancias psicoactivas, a pesar de que para los Policías solo es posible ingresar en operativos masivos y armados.
Para los jóvenes resulta más fácil. Lo único que hacen es pasar una requisa. Según las imágenes captadas por la cámara, algunos de ellos se quedan allí durante todo el fin de semana.
Padres preocupados llegan a la calle para buscarlos, sin embargo, se encuentran con personas que no les permiten ingresar.
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Un estudiante le dijo a ese medio que “esto es una moda. En mi colegio muchos compañeros van después de clases, toca dejar el saco y la maleta porque a uno lo requisan y le quitan las cosas. La rumba es pesada y uno siempre tiene temor de que vaya a pasar algo, pero es una moda porque todos lo hacen siguiendo a los demás”.
Al final del fin de semana, el domingo o el lunes festivo, si es el caso, grupos de 40 jóvenes salen e ingresan a la estación de la calle 6 sin pagar su pasaje.
Asimismo, Citynoticias comprobó que menores entre los 13 y 15 años son atendidos en el Hospital Santa Clara con síntomas de consumo de estupefacientes.
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