Un llamado urgente a ajustar la política de seguridad y las estrategias sociales agitó el debate público este jueves. El pronunciamiento, difundido en redes sociales por un exalcalde de la capital, comienza solidarizándose con las víctimas recientes de la violencia: “Me uno a las condolencias a las familias”.
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A renglón seguido, contrasta el récord alcanzado en 2022 —el año con menos homicidios en 62 años— con el repunte de 13,4 % en el total de asesinatos que, según él, registra Bogotá en lo corrido de 2025. El alza, enfatiza, es aún más aguda en feminicidios y homicidios de mujeres: +25 %.
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La exmandataria atribuye la escalada a un deterioro social ligado al aumento de la pobreza en la ciudad. “Duele que Bogotá retroceda”, lamenta, antes de recalcar que su crítica no busca obstruir, sino mejorar la gestión actual: “Todos queremos, incluyéndome, que al Alcalde le vaya bien para que a Bogotá le vaya bien”.
No obstante, insiste en que la administración debe mostrar humildad para reconocer los problemas y audacia para innovar y corregir. Su exhortación final —“Hay que corregir ya”— se interpreta como presión para que el Distrito anuncie medidas inmediatas: refuerzo de pie de fuerza, focalización de inversión social y nuevos programas de prevención del delito.
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De igual forma, en la publicación adjuntó un par de imágenes donde se muestran cifras preocupantes, como por ejemplo, el número de mujeres víctimas de violencia creció en un %25. También, solo en marzo de 2025 el 69% de homicidios fue con arma de fuego.
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Por otro lado, hizo una comparativa en temas sensibles como secuestro, violencia intrafamiliar, homicidios y lesiones personales. Todos en menos de un año aumentaron, siendo el secuestro el de mayor crecimiento con un incremento del 180%.
Finalmente, mientras el despacho del alcalde evalúa la respuesta, la oposición y varios expertos en seguridad advierten que la capital corre el riesgo de perder los avances alcanzados tras dos décadas de reducción progresiva de la violencia letal.
