El pasado 8 de abril se estableció la medida del racionamiento de agua potable en Bogotá por la emergencia generada por el fenómeno de El Niño. Esta emergencia generó una situación critica en la capital que se encontró con los embalses que la alimentan de agua potable en un nivel preocupante. Debido a esto, el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, decretó la medida del racionamiento con el fin de que los embalses recuperen su nivel y extender el recurso en el tiempo.
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Con respecto al consumo de agua Bogotá ha mejorado su comportamiento y presenta un decrecimiento importante con respecto a las anteriores semanas. Desde el establecimiento del racionamiento la meta de la Alcaldía es que el consumo diario de Bogotá sea menor a 15 metros cúbicos por segundo, pero esa meta solo se ha logrado un día desde el 8 de abril. De igual forma, el consumo se ha mantenido en un promedio de 15,5 metros cúbicos, aunque por varias semanas fue superior a 16. De esta forma, según los datos entregados por el Acueducto de Bogotá, el consumo de agua potable durante el martes 4 de junio fue de 15,55 metros cúbicos por segundo.
¿Cómo están los embalses de Bogotá?
La efectividad de la medida se ha hecho notoria cerca del tercer mes desde su instalación. En su momento, los embalses del Sistema Chingaza llegaron a estar cerca del 15% de capacidad, para la mañana del miércoles 5 de junio los embalses reportaron un nivel de 32,93%. Esto demuestra que las medidas adoptadas desde el Distrito han dado un resultado positivo para la ciudad, pero aún no es suficiente para levantar la medida.
Carlos Fernando Galán, mandatario de los capitalinos, celebró el comportamiento de la capital con respecto al consumo y cuidado del agua, pero manifestó que con el fin de superar el fenómeno de El Niño que llegará a finales de este año, y tendrá su punto más alto en el 2025, es necesario que los embalses de la ciudad lleguen a octubre en un mínimo del 70%. Esta meta fue cambiada por el buen comportamiento de la ciudad y las condiciones climáticas en la zona de influencia en los embalses, ya que, en principio, la meta del 70% estaba planteada para diciembre.
